Gustav Klimt: Pallas Atenea (1898)
Antes de dar fin a aquel combate, el pueblo entero elige a la doncella que se ha portado mejor en el choque; ármanla con un yelmo corintio y con una armadura griega, y puesta encima de un carro llévanla alrededor de la laguna.
Ignoro con qué armadura adornasen a sus doncellas antes de tener por vecinos a los griegos, si bien me inclino a pensar que con la armadura egipcia, porque mantengo que los griegos tomaron de los egipcios el yelmo y el escudo.
Por lo que toca a Atenea, dicen ellos que fue hija de Poseidón y de la laguna Tritónida, pero que enojada por cierto motivo contra su padre se entregó a Júpiter, el cual se la apropió por hija: así lo cuentan al menos. Las relaciones de hombres y mujeres son promiscuas aquí; no cohabitan pero tienen el trato sexual como el ganado. Cuando el hijo de una mujer está bien crecido, los hombres se juntan en tres meses y el niño es adjudicado al hombre al que se parece más.
Herodoto. Historia, IV, 180.