miércoles, 15 de abril de 2015

Lucha de dánaos y troyanos


Como las olas impelidas por el Céfiro se suceden en la ribera sonora, y primero se levantan en alta mar, braman después al romperse en la playa y en los promontorios, suben combándose a lo alto y escupen la espuma; así las falanges de los dánaos marchaban sucesivamente y sin interrupción al combate. Los capitanes daban órdenes a los suyos respectivos, y éstos avanzaban callados (no hubieras dicho que les siguieran a aquéllos tantos hombres con voz en el pecho) y temerosos de sus jefes. En todos relucían las labradas armas de que iban revestidos. — Los teucros avanzaban también, y como muchas ovejas balan sin cesar en el establo de un hombre opulento, cuando al ser ordeñadas oyen la voz de los corderos; de la misma manera elevábase un confuso vocerío en el ejército de aquellos. No era igual el sonido ni el modo de hablar de todos y las lenguas se mezclaban, porque los guerreros procedían de diferentes países.— A los unos los excitaba Ares; a los otros, Atenea, la de los brillantes ojos, y a entrambos pueblos, el Terror, la Fobo y la Discordia, insaciable en sus furores y hermana y compañera del homicida Ares, la cual al principio aparece pequeña y luego toca con la cabeza el cielo mientras anda sobre la tierra. Entonces la Discordia, penetrando por la muchedumbre, arrojó en medio de ella el combate funesto para todos y acreció el afán de los guerreros.

Homero, Ilíada, IV, 422-445. (Traducción de Luis Segalá y Estalella, 1910)

jueves, 26 de marzo de 2015

Nauplia


 Pozo de Canathus

Conjeturo que a cincuenta estadios de Temenio está Nauplia, que hoy día está deshabitada; su fundador fue Nauplio, presunto hijo de Poseidón y Amymone. Aún permanecen también las ruinas de las murallas y hay un santuario de Poseidón, muelles y un manantial llamado Canathus. Aquí, dicen los argivos, Hera se bañaba cada año y recuperaba su virginidad.

Pausanias. Descripción de Grecia, II, 38, 2.

lunes, 16 de marzo de 2015

La estatua de Hera


La estatua de Hera está sentada en un trono; es enorme, hecha de oro y marfil y es una obra de Policleto. Lleva una corona con las Gracias y las Estaciones grabadas en ella y en una mano lleva una granada y en la otra un cetro. Acerca de la granada no debo decir nada porque su historia es un poco un misterio sagrado. La presencia de un cuco sentado en el cetro la explican con la historia de cuando Zeus estaba enamorado de Hera siendo ella doncella. Él se convirtió en este pájaro y ella le cogió para ser su mascota. Esta historia y leyendas similares acerca de los dioses las cuento sin creer en ellas, pero sin embargo las cuento.

Pausanias. Descripción de Grecia, II, 17, 4.

lunes, 2 de marzo de 2015

Santuarios de Zeus y Hera



Incluso hoy día hay santuarios en las cimas de las montañas: sobre el monte del Cuco hay uno de Zeus, sobre el monte Pron uno de Hera. A los pies del monte del Cuco hay un templo, pero no tiene puertas y lo encontré sin techo y sin imagen dentro. El templo se dice que fue de Apolo. Al lado de éste hay un camino que lleva a Mases para los que se han apartado del camino directo. Mases era una ciudad en los tiempos antiguos, incluso Homero la nombra en su catálogo de los Argivos, pero en mi época los habitantes de Hermíone la usaban como puerto.

Pausanias. Descripción de Grecia, II, 36, 2.