lunes, 25 de febrero de 2013

Los hijos de las diosas

 Joseph Noel Paton: Hesperus (1857)

Euribia, diosa resplandeciente, se unió por amor a Crío y dio a luz al gran Astreo, a Palas y a Perses, que también fue eminente en sabiduría entre los hombres.
Eos, una diosa uniéndose por amor con un dios, le dio a Astreo los vientos de fuerte corazón, al brillante Céfiro, a Bóreas, rápido en su curso, y a Noto,  Y después de éstos Eos Erigenia dio a luz a la estrella Eósforo (la que trae el amanecer) y a las brillantes estrellas con las que es el cielo está coronado.
Estigia, la hija de Océano, se unió a Palas y dio a luz en el hogar a Zelo (la Emulación) y a Nike (la Victoria), la de tobillos adornados. También dio a luz a Cratos (el Poder) y a Bía (la Fuerza), hijos maravillosos.

Hesíodo. Teogonía, 375-383

domingo, 17 de febrero de 2013

Las mujeres troyanas suplican a Atenea


Templo de Atenea en Priene (Turquía)

Hécabe volviendo al palacio, llamó a las esclavas, y éstas anduvieron por la ciudad y congregaron a las matronas; bajó luego al fragante aposento donde se guardaban los peplos bordados, obra de las mujeres que se llevara de Sidón el deiforme Alejandro en el mismo viaje en que robó a Helena , la de nobles padres; tomó, para ofrecerlo a Atenea, el peplo mayor y más hermoso por sus bordaduras, que resplandecía como un astro y se hallaba debajo de todos, y partió acompañada de muchas matronas.

Cuando llegaron a la acrópolis, abrióles las puertas del templo Teano, la de hermosas mejillas, hija de Ciseo y esposa de Antenor, domador de caballos, a la cual habían elegido los troyanos sacerdotisa de Atenea. Todas, con lúgubres lamentos, levantaron las manos a la diosa. Teano, la de hermosas mejillas, tomó el peplo, lo puso sobre las rodillas de Atenea, la de hermosa cabellera, y orando rogó así a la hija del gran Zeus:

—¡Veneranda Atenea, protectora de la ciudad divina entre las diosas! ;Quiébrale la lanza a Diomedes, concédenos que caiga de pechos en el suelo, ante las puertas Esceas, y te sacrificaremos en este templo doce vacas de un año, no sujetas aún al yugo, si de este modo te apiadas de la ciudad y de las esposas y niños de los troyanos!

Tal fue su plegaria, pero Palas Atenea no accedió.

Homero. Ilíada, VI, 286-311.

martes, 12 de febrero de 2013

El vestido de Atenea


Al parecer, el vestido y la égida de las imágenes de Atenea fueron copiadas por los griegos de las mujeres libias, pues salvo que el vestido de la mujer libia es de cuero y que los flecos de sus mantos de piel de cabra no son serpientes, sino correas de cuero, en todo lo demás su equipamiento es el mismo.  
Y de hecho, el mismo nombre revela que la vestimenta de las estatuas de Palas ha venido de Libia, porque las mujeres libias llevan la "egea" con borlas sin pelo sobre su vestido, coloreada con rubia, y los griegos han cambiado el nombre de esta "egeas" en sus égidas.
Además, en mi opinión, el canto ceremonial se originó primero en Libia porque las mujeres de ese país cantan muy armoniosamente. Y es de los libios que los griegos han aprendido a conducir carros de cuatro caballos.

Herodoto. Historia, IV, 189.

jueves, 31 de enero de 2013

Maclíes y auseos


Gustav Klimt: Pallas Atenea (1898)

En Libia son fronterizos de los Maclíes los Auseos, pues ambos habitan en las orillas de la laguna Tritónida divididos entre sí por el río Tritón. Los Maclíes se dejan crecer el pelo en la parte posterior de la cabeza, y los Auseos en la parte anterior de ella. Hacen todos los años una fiesta a Atenea, en la cual, sus doncellas repartidas en dos bandos, luchan con piedras y palos, y dicen que practican aquellas ceremonias, propias de sus antepasados, en honra de aquella diosa su paisana a la cual llamamos Atenea. A las doncellas que mueren de aquellas heridas las llaman falsas vírgenes.
Antes de dar fin a aquel combate, el pueblo entero elige a la doncella que se ha portado mejor en el choque; ármanla con un yelmo corintio y con una armadura griega, y puesta encima de un carro llévanla alrededor de la laguna.
Ignoro con qué armadura adornasen a sus doncellas antes de tener por vecinos a los griegos, si bien me inclino a pensar que con la armadura egipcia, porque mantengo que los griegos tomaron de los egipcios el yelmo y el escudo.
Por lo que toca a Atenea, dicen ellos que fue hija de Poseidón y de la laguna Tritónida, pero que enojada por cierto motivo contra su padre se entregó a Júpiter, el cual se la apropió por hija: así lo cuentan al menos. Las relaciones de hombres y mujeres son promiscuas aquí; no cohabitan pero tienen el trato sexual como el ganado. Cuando el hijo de una mujer está bien crecido, los hombres se juntan en tres meses y el niño es adjudicado al hombre al que se parece más.

Herodoto. Historia, IV, 180.